¡Llegaron las ánimas! – Los Fieles Difuntos están de fiesta y disfrutarán de un bollo elaborado en su honor: el pan de muerto

 

Foto: Bertha Herrera

POR MARICHUY GARDUÑO/ FOTOS: BERTHA HERRERA

 

Como cada año la Catrina llegó
Y la fecha se cumplió
Porque a tú mesa muy puntual llegó
Contenta con la fiesta muy galana se presentó
Y a todos invitaba muy contenta a quien la visitó
Pasen, pasen decía, vengan todos a comer
Y un rico pan de muertos disfrutó.

 

El pan de muerto dulce, esponjoso, adornado con cuatro o más canillas y espolvoreado con azúcar blanca o solferina es una delicia de temporada. Este es preparado de harina de trigo, manteca, agua de azahar, raspadura de naranja y anís. Se trata de una especialidad que no puede faltar en las ofrendas mexicanas.

Por ello, no es raro ver dibujadas, en las vitrinas de las panaderías de México, a las Catrinas sentadas a la mesa comiendo gustosas su delicioso pan de muerto.

Sin duda, un antojo irresistible cuando se sopea con una taza humeante de chocolate, elaborado ya sea con leche o agua.

En el texto El Pan Nuestro de Cada Día, editado por la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa), se menciona que en varios estados de la República Mexicana se hacen los panes de diferentes formas, entre los que destacan: ánimas, vírgenes, borregos, conejos, campesinos, sombreros, flores y calaveras, entre otras.

VERSATILIDAD CULINARIA

Actualmente, estos bollos tradicionales son elaborados de forma muy original y con rellenos que van desde nata, cajeta, arándanos, hasta flores comestibles.

Por ejemplo, la chef Ana María Arroyo, del restaurante El Tajín en la Ciudad de México, hace un pan de muerto de harina mezclada con flores de cempasúchil.

“Esta flor era abundante en la parte central de México en la época prehispánica. Actualmente, es símbolo significativo para adornar ofrendas y tumbas en la celebración a los Fieles Difuntos”, expresa Arroyo.

La chef agrega que “la flor de los 20 pétalos”, es extremadamente aromática y de sabor fuerte, además de poseer un llamativo color anaranjado. Por ello, se debe de emplear en la cocina con mucho cuidado.

“Al usar los pétalos de esta flor se tiene que retirar el pistilo, porque si lo dejamos puede amargar. Al probarlo en la preparación del pan se percibe un sabor a naranja muy persistente”, enfatiza la chef.

La chef menciona que la tradición de Día de Muertos en México es algo que todos presenciamos, ya que es una forma de recordar a nuestros seres queridos que ya no están entre nosotros.

“El pan tiene la forma del ánima que se espera, comérselo es la máxima expresión de la comunicación con lo sagrado”, puntualiza la chef.

Encuentra una receta para hacer pan de muerto aquí.

Para deleite de nuestros lectores, tenemos el placer de presentar a nuestras nuevas colaboradoras, la periodista Marichuy Garduño y la fotógrafa Bertha Herrera. Encuentren más sobre estas pioneras del periodismo gastronómico en México en su página www.conapetito.com.mx 

Marichuy Garduño

Periodista gastronómica con 25 años de experiencia. Ha trabajado en los suplementos culinarios de los diarios más importantes de México como Buena Mesa, Reforma; Menú impreso y Online, de El Universal. Actualmente es editora de Pimienta, Excélsior.

A lo largo de su carrera, Marichuy ha entrevistado a varias personalidades del medio gastronómico, de la política y la literatura, entre los que destacan Enrique Olvera, Ricardo Muñoz Zurita, Alicia Gironella, Massimo Bottura, Gastón Acurio, Alex Atala, Robert Mondavi, Carlos Monsiváis, Cuauhtémoc Cárdenas, Elena Poniatowska y Jacobo Zabludovsky entre otros.

 

Bertha Herrera

Comunicóloga de profesión, fotógrafa por convicción. Chilanga de nacimiento, oaxaqueña de corazón. Adicta a  capturar  imágenes, a resaltar las texturas de las cosas y de las personas. A lo largo de 23 años ha retratado grandes personajes vinculados con la gastronomía, la arquitectura, la moda, el diseño, la cultura, se ha especializado en la fotografía gastronómica, tomando cursos de food styling en en el Culinary de Nueva York.

Ha trabajado en dos de los periódicos más importantes de México como son El Reforma y El Universal, y ha colaborado para  revistas relacionadas con estilos de vida, como El Gourmet, Chilango, In Style, Ha sido testigo de la transformación que ha habido dentro de la gastronomía mexicana. Para su lente han posado iconos de la cocina mexicana como Carmen Ramírez Degollado, Patricia Quintana, Alicia Gironella,  Giorgio D´ Angeli, Mónica Patiño y grandes cocineras tradicionales como Abigail Mendoza, Deyanira Aquino, Benedicta  Alejo. También destacados chefs como Ferran Adrià, René Redzepi , Joan Roca, Massimo Botura  Juan Mari Arzac , e infinidad de personajes famosos del mundo del espectáculo, la moda, la arquitectura, la cultura.

Como dice la canción  “veinte años no es nada”, pero para ella han sido un cúmulo de experiencia en el ha conocido y viajado. Bertha ha hecho la fotografía para tres libros relacionados con la gastronomía. El libro acerca del chile es el que más emoción le ha causado.